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26 de março de 2019 às 21:44 23 views ❝Dicen que soy tierna & una sentimental, & quizá están en lo correcto. Me movilizo particularmente por aquellos que me aman & a quienes amo. Es cierto que tengo un gran sentido de la amistad, de la solidaridad, & que me siento atraída por lo irracional, los misterios, lo extraño, lo mágico & lo fantástico, ¿acaso soy la única que ha notado las sucesos extraños que ocurren en el pueblo?. Me gusta cooperar con mis pares & sé dar muestras de conciliación. No siempre soy fácil de alcanzar, ya que tengo mucho pudor, un exceso de reserva & timidez, acompañados de dificultades de comunicación. También soy fina e intuitiva, espero que me descubran, & a menudo espero mucho tiempo… Sin embargo, soy una compañera fiel❞. ▬ Lexie Adelaide Blight. Veinte años. Estudiante de literatura. Trabaja en la biblioteca del pueblo. ✿✿✿. Un 23 de febrero de 1999 nacía la última hija de Theodore y Galilea Blight, más precisamente a las 4:30 am y fue bautizada bajo el nombre de Lexie. La pequeña de grandes ojos azules fue criada con amor y protección toda su vida; no eran de las familias más adineradas en Ipswich, pero al menos les alcanzaba para ser felices y tratar de darle los gustos a sus hijos. Desde muy niña Lexie siempre fue del tipo extrovertida, tímida y retraída, vivía en su propio mundo de maravillas y aquello a veces la metía en problemas, sobre todo en el colegio. Su madre, siempre veía a Lexie como la más sensible de sus hijos, y cierto era, pues ella lo demostraba siempre, aunque se le veía a leguas aquella sensibilidad nata. Mediante iba creciendo se interesó por los libros de cuento, sus favoritos eran aquellos en donde la magia y el misterio hacían sus apariciones; llegando a su adolescencia se volvió una chica más abierta, pero siempre conservando su humildad y ternura. A sus 16 años decidió que quería estudiar literatura, puesto que los libros y sus historias lograban atraparla en cada página que ésta leía. Ése mismo año su padre al fin pudo abrir su propio taller mecánico y logró llevarse la fama del mejor de todo Ipswich, por ende comenzaron a tener un poco más de dinero; pero la desgracia no tardó en aparecer, cuando a la madre de Lexie se le detectó leucemía avanzada. Aunque su padre hizo lo imposible para pagar los tratamientos, Galilea falleció dejando a Theodore a cargo de la casa, el taller y sus dos hijos; aquel año fue el peor para la menor de los Blight, puesto que a ella fue a la que más le afectó la pérdida; pero de todas formas debía seguir, sabía que dónde quiera que su madre estuviera se sentiría orgullosa de ella. Apenas se graduó de prepa entró a la universidad a estudiar literatura, carrera la cual sigue actualmente, tambien consiguió trabajo en la biblioteca pública del pueblo, no sólo para ayudar a su padre con las cuentas si no también porque adora hacer aquello, estar rodeada de libros e historias; como la de Ipswich que luego de varias investigaciones ha llegado a la deducción de que no todo allí es lo que parece y que hay algo detrás de las cinco familias más antiguas que llama mucho su atención. ¿Será que Lexie está a punto de descubrir el gran secreto que han guardado por cientos de años? 
1. xnoha 27 de março de 2019 às 00:35Noha había estado ocupado mudándose, había conseguido un departamento disponible en un edificio cercano al centro que quedaba justo a la mitad de su camino normal entre su casa y el restaurante, se encargó de mover sus cosas durante la noche con ayuda de sus hermanas, pues no quería que todo el pueblo se diera cuenta de su mudanza, inclusive pidió prestada una camioneta a uno de los amigos de su madre para poder mover los muebles con mayor facilidad. Y así estuvo los últimos cuatro días, organizando todo en su nuevo departamento en el que comenzó a vivir definitivamente hace uno, estaba contento con la elección que había hecho debido a que era tiempo de salir de su casa y el alquiler no interfería tanto con sus planes de ahorro lo cual estaba de maravilla. Después de salir de trabajar, se dirigió a la cafetería done trabajaba su madre para esperarla e ir juntos a casa, pero lamentablemente le informó que no podría ir con él porque tendría que quedarse algunas horas más en el trabajo.
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2. xnoha 27 de março de 2019 às 00:35Se dirigió al supermercado a comprar algunas cosas que él consideró pertinentes para enseñarle, comenzando por una sencilla pasta que, según ella le hizo saber, terminaba por quemarse cuando intentaba cocinar. Pagó y se puso en marcha con dirección a la casa de Lexie, justo frente a la suya, donde dejó de vivir apenas ayer; sólo rogaba que sus hermanas no vieran a donde se dirigía o comenzarían a molestar. Al llegar, dejó una bolsa sobre el suelo para presionar el botón del timbre y en efecto, ella salió, notoriamente extrañada al tenerlo frente a la puerta de su casa con un par de bolsas de supermercado en mano — Hola — Mostró una ligera sonrisa en su rostro al verla y, sin duda estaba nervioso, pero no entendí a por qué. — ¿Tienes tiempo para una clase? — Preguntó aún esperando a que ella le dejara pasar si es que obtenía una respuesta positiva.
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3. xnahla 27 de março de 2019 às 01:09Debía aceptar que ver a tantas personas en aquel bar le había sorprendido, no había esperando encontrarse con tantos asistentes así que cuando escuchó la voz de la contraria no pudo evitar soltar una pequeña risa. —Al parecer sí, creo que es más popular de lo que imaginé— Respondió la castaña esbozando una sonrisa a la vez que se acomodaba el cabello de manera inconsciente, deslizó su mirada por el lugar hasta caer en su acompañante —Así que... ¿comenzamos a beber algo?— Le preguntó elevando sus cejas un par de veces como si se tratara de una travesura entre ellas.
4. xnoha 27 de março de 2019 às 01:13Se sintió aliviado cuando la escuchó hablar y no sólo por el hecho de que lo dejara pasar, sino que pudo notar que en el tono de voz de la joven Blight que él no era el único que se sentía con nerviosismo, quizás el de ella sólo se debía a la sorpresa que me causó que llegara de repente sin previo aviso. — Gracias — Exclamó sin apartar sus ojos de los de su contraria y dio unos cuantos pasos para entrar, no prestó mucha atención a los detalles de la casa como normalmente acostumbraba cuando visitaba un nuevo sitio, no quería aparentar que hacía alguna crítica, pero quizás podría tomar unas ideas para decorar su departamento y en eso, la escuchó hablar de nueva cuenta — Claro ¿Cómo no iba a recordarlo? Si serás mi primer alumna — Mencionó con un ligero toque de gracia en las últimas tres palabras, incluso se tomó la libertad de bromear un poco con ella luego de que mencionara lo de su cena, el día de hoy se encontraba de buen humor (o al menos hasta el momento) así que estaba bien para él — La cena o tu casa — Negó con su cabeza, sujetando con mayor firmeza las bolsas que llevaba entre sus manos — No, yo puedo llevarlas, sólo dime hacia donde está tu cocina —
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5. xnoha 27 de março de 2019 às 12:31Noha asintió suavemente cuando ella comenzó a caminar para indicarle el camino hacia la cocina de su hogar, que por cierto estaba solo unos cuantos pasos de donde ellos se encontraban, justo al centro de la casa. Al llegar, sus ojos recorrieron con detenimiento cada rincón del espacio, sorprendiendose de lo bien equipada que estaba, casi semejante a la que él solía tener en casa de su madre, pues es bien conocidos que ambos adoran cocinar. — Gracias, Lexipedia — Exclamó con total naturalidad su sobrenombre, como si ella de verdad se llamara de esa forma. Lo segundo que hizo fue colocar las bolsas que traía en sus manos sobre la encimadera para disponerse a sacar todo lo que traía y acomodarlo en orden. Le gustaba que todo estuviera en perfecto orden, y esa cocina cumplía con todas sus expectativas sino hubiese sido por la acción de su contraria, que tomó asiento a un costado de donde él había dejado las bolsas. Sus ojos de color oliva se posaron sobre los de ella, observándola un tanto incómodo y no muy amablemente dándole a entender que no estaba de acuerdo con lo que hizo, sin embargo, a ella parecía no importarle. Dejó de sacar las cosas y se paró delante de ella, cruzandose de brazos aun sin apartar su vista de sus hermosos ojos azules, tan azules como el mar. — Regla número uno. Nunca nos sentamos sobre nuestra área de trabajo — Exclamó con firmeza, probablemente a partir de ahora sería un poco diferente, quizás. — Regla número dos, no hagas nada extraño que haga salir al Gordon Ramsay que llevo dentro — Reprimió lo más que pudo una risa, algo que le funcionó muy bien gracias a su habilidad de reprimir sus emociones y sentimientos; después de ello, volvió a hacer lo que dejó pendiente mientras ella se bajaba de ahí — Pasta, eso haremos, dijiste que se te quemaba, bueno, aprenderás a que no te vuelva a suceder.
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6. xblake 28 de março de 2019 às 00:31FDR: Perdon si teniamos un rol y no lo sigo, estuve un poco alejado de aqui y me gustaria retomar con un papel donde ya se conozcan los personajes espero te guste y lo sigamos. |
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