Visitors
Today:
5
|
4 de outubro de 2021 às 05:37 24 views
—¿Eh? —exclamó Hagrid, sin entender—. ¡No, no te vayas! ¡Yo no... —¿«Otgo» qué, exactamente? —preguntó Madame Maxime, con un tono gélido. Harry le hubiera aconsejado a Hagrid que no respondiera. Oculto en la —¡Otro semigigante, por supuesto! —repuso Hagrid. —¡Cómo te «atgueves»! —gritó Madame Maxime. Su voz resonó en el Se marchó furiosa. A medida que pasaba, apartando enojada los arbustos, se levantaban en el aire enjambres de hadas multicolores. Hagrid permaneció sentado en el banco, mirándola. Estaba demasiado oscuro para ver su expresión. Luego, aproximadamente un minuto después, se levantó y se fue a grandes zancadas, no de regreso al castillo sino atravesando los oscuros terrenos de camino a su cabaña. —Vamos —le dijo Harry a Ron en voz muy baja—, vámonos. Pero Ron no se movió. —¿Qué pasa? —preguntó Harry mirándolo.
|
%LOGIN% %TIMESTAMP%
%COMMENT%